¿En qué consiste jugar responsablemente?

Un jugador responsable es aquel que utiliza los juegos de azar de forma consciente y recreativa. Establece sus propios límites de tiempo y dinero dedicados a esta actividad en función de su situación y circunstancias particulares.

Los juegos son actividades necesarias y naturales que utilizamos a lo largo de toda la vida como forma de aprendizaje y desarrollo, esparcimiento y distracción. Sin embargo, cuando el juego deja de ser un entretenimiento y pasa a ser casi una necesidad, puede tener consecuencias negativas tanto en lo personal, como en lo familiar, social, etc. Ese comportamiento puede ser síntoma de juego problemático.

Cuando la persona pierde el control de su relación con el juego, y realiza la actividad con mínima capacidad de decisión, podemos decir que sufre de un trastorno por juego compulsivo: se trata de un comportamiento adictivo en su relación con una actividad - en este caso - de entretenimiento, que puede afectar drásticamente distintos aspectos de su vida.


¿Qué recomendamos para jugar de forma sana y responsable?

  • Pensar los juegos de azar como una oportunidad de diversión, no como una forma de ganar dinero.
  • Establecer un tiempo y un presupuesto determinado para jugar.
  • No jugar en tiempos de sensibilidad emocional.
  • Equilibrar el tiempo dedicado al juego con otras actividades de esparcimiento.
  • No intentar “recuperar” el dinero utilizado para jugar.
  • El juego es diversión
  • Es diversión y esparcimiento
  • Es natural y necesario para el ser humano
  • Es una distracción, que se realiza en momentos libres
  • Cuando el JUEGO se hace PATOLÓGICO, es un PROBLEMA tanto para quien lo padece como para su familia y su entorno social